Muelas del juicio
La muela del juicio o tercer molar es la última muela que sale en la boca. Suele haber cuatro, dos de ellas superiores y dos inferiores y, en cada caso, una en cada lado y erupcionan en la parte más posterior de la boca.
¿Cuándo se forman?
Empiezan a formarse a los 9 años y el tiempo que tardan en completarse es muy variable entre las personas. Incluso hay individuos en los que están ausentes.
¿Cuándo erupcionan en la boca?
Es muy variable y depende de su posición y orientación. Si están correctamente posicionadas y orientadas pueden erupcionar alrededor de los 20-25 años, pero con frecuencia no ocurre así. La razón es doble: En unos casos, la posición y orientación de la muela impide el normal progreso de la misma a través del hueso con el fin de acabar erupcionando en la boca; en otros casos, a pesar de presentar una correcta posición y orientación no hay espacio en la boca para que quepa. Como consecuencia, la muela queda impactada, es decir, atrapada en el interior del hueso.
¿Cómo sabe el odontólogo que está impactada?
Mediante una radiografía.
¿Qué problemas pueden producir si no consiguen erupcionar correctamente?
Pueden ser múltiples: Por efecto del empuje sobre la muela que queda por delante puede llegar a destruir la parte posterior de ese diente e incluso su raíz; igualmente, puede provocar la inflamación de la encía y el hueso que la rodea; también puede condicionar la aparición de quistes en el hueso.
¿Son, las muelas del juicio, responsables del apiñamiento de los dientes anteroinferiores?
Su papel no queda claro ya que los pacientes sin muelas del juicio presentan apiñamiento e incluso aquellos pacientes a los que se les ha extraído las muelas del juicio por este motivo, siguen igualmente presentando un apiñamiento progresivo. De todas formas, si el hueso no tiene espacio suficiente para albergar todos los dientes es lógico pensar que la erupción de cuatro muelas más dé lugar a apiñamientos.
¿Por qué duelen las muelas del juicio?
La causa más frecuente es la infección de la encía y el hueso que la rodean. Cuando la muela está medio erupcionada y asoma una porción de la misma a través de la encía, queda un fondo de saco alrededor de ella que acumula microbios y restos de alimento. Este fondo de saco no puede limpiarse y en algunos casos los microbios que contiene provocan la infección de los tejidos circundantes dando lugar a una sintomatología característica: dolor a la palpación de esa encía, inflamación e incluso dificultad y dolor al tratar de abrir la boca y al tragar.
¿Qué hay que hacer cuando duele una muela del juicio?
Hay que tomar el antibiótico adecuado así como analgésicos y antiinflamatorios. También es aconsejable realizar enjuagues con antisépticos que no contengan alcohol.
¿Cuándo decidimos que hay que sacar una muela del juicio?
Si los brotes de dolor (infección) se dan con excesiva frecuencia, aunque la muela erupcione correctamente, se planteará su extracción. Cuando la muela del juicio no erupcione correctamente o no tenga posibilidades de hacerlo se extraerá siempre, independientemente de que provoque o no brotes de infección.
¿Cuál es el momento adecuado para realizar la extracción de la muela del juicio?
Si no hay brote infeccioso, es preferible sacarla lo antes posible ya que no ganamos nada demorándolo. Si hay brote infeccioso, deberemos esperar a que remita.
¿Por qué se suelen sacar a la vez la muela del juicio de arriba y la de abajo?
Los dientes mantienen toda la vida la capacidad de erupcionar. Esa misma capacidad que hace erupcionar los dientes temporales o de leche así como los dientes definitivos persiste. El motivo por el cuál no percibimos esa capacidad es porque los dientes entran en contacto con los del arco dentario opuesto (los de arriba con los de abajo) y se frenan mutuamente. Si se pierde un diente, el diente contrario empezará a erupcionar y se desplazará hacia el espacio que ocupaba el diente perdido. Cuando se trata de muelas del juicio, la extracción de una favorecerá, con el tiempo, la erupción excesiva de la muela del juicio contraria. Este hecho acarreará problemas de impactación de alimentos entre ella y la muela vecina así como trastornos durante los desplazamientos de la mandíbula. Para evitar estas consecuencias más que previsibles, se suele indicar la extracción simultánea de las muelas del juicio de un lado de la boca.
¿Por qué hay que hacer una radiografía panorámica antes de sacar una muela del juicio inferior?
Porque muy cerca de la punta de sus raíces circula el nervio dentario inferior. Este nervio da sensibilidad a los dientes inferiores y a los tejidos blandos que rodean la boca. En algunos casos, el nervio está en íntimo contacto con esas raíces e, incluso, llega a circular entre ellas. Lógicamente, estos hechos condicionarán la técnica de extracción de la muela con el fin de evitar lesionar el nervio.